Ten cuidado

Ten cuidado

que tu sonrisa cambia mis días,

ten cuidado

que tu belleza dibuja alegrías.

Ten cuidado

de cambiar mi humor con una caricia

y sonrojar mi rostro al dejar un suspiro

que llega volando con una primicia. 

Ten cuidado

con las piedras dulces que llevo en el pecho

esperando ese momento que llego contigo

y te ofrezco cada uno de mis tesoros escondidos.

Ten cuidado

de hacerte daño que no soportaría verte triste,

te doy mi vida por la tuya,

 que te sientas orgullosa de tener algo tan bueno,

que la vida te sepa a uvas y no ocupes consuelo.

Ten cuidado

que nadie nos ha enseñado como vivir,

acompáñame en mi aventura

tu siendo reina de mi locura

y yo el rey que más te adora.

Un paso más cerca y un día más rendido ante ti...

Yo jamás pensé que encontraría una razón más inteligente que escribir de amor estando triste pero hoy me siento afortunado por tener la dicha de perderme locamente de amor con la mujer de mis poesías, me di cuenta que escribir poemas al ser correspondido es mucho más bonito por que las letras tienen mucho más sentido, entre más las leo más me saben. Estoy perdido en su piel y en su piel escribo los poemas más bonitos del mundo, ella es mi misterio más grande y yo, rendido ante su increíble belleza, la voy a inmortalizar con mis palabras, con mis mil pecados de amor para tenerlos todos con ella.

Nelson Quintero González.